domingo, 31 de julio de 2016

Como evoluciono el pensamiento militar en la Guerra de Independencia venezolana


Escrito por:
Teniente Coronel Edgar Alejandro Lugo Pereira

Especialista en Historia Militar
IAEDEN, julio, 2016

Pensamiento

«Miren ustedes lo que son las cosas; si no hubiera enviudado quizás mi vida hubiera sido otra cosa; no seria el general Bolívar, ni El Libertador, aunque convengo que mi genio no era para ser alcalde de San Mateo… La muerte de mi mujer me puso muy temprano sobre el camino de la política; me hizo seguir después el carro de Marte en lugar del arado de Ceres»

Diario de Bucaramanga.

Escrito por Luis Perú de Lacroíx, entrevistando al Libertador
 10 de mayo de 1828.


Premisas para un mejor entendimiento del tema

·Doctrina: ciencia, sabiduría enseñanza.

·Técnica: relativo a las artes, recursos y procedimientos de la ciencia.

·Operacional: la realización y ejecución de las dos premisas anteriores.

Precepto

·La historiografía nos muestra una visión compleja del análisis de la historia a través de las ideas de cada periodo, observando con precisión, como el pensamiento (doctrina), los inventos (técnica) y la operacionalizacion (maniobra), han modelado las victorias y las derrotas de las sociedades beligerantes, a través de un proceso de creación y cambio constantes, imponiéndose estos criterios por encima de la rigidez de planteamientos, sobrepasados por la necesidad de evolucionar, buscando el fin último de superar en todos los terrenos al adversario.

Fractura del paradigma

Históricamente y militarmente, las grandes masas de tropas, eran mandadas y conducidas con severidad, haciendo énfasis en una disciplina férrea, muy alejada de la acción del líder. Espartanos, macedonios, cartagineses y romanos son nuestros principales referentes.
El Siglo XVIII, se caracterizaría por un reflujo constante entre el pensamiento de avanzada en materia militar, el oposicionismo político sobre esta última mencionada y la escasa presencia de los grandes capitanes.
Lo ancestral

Hay que considerar los aportes que en materia táctica entregaron los nativos precolombinos y la africanidad durante el proceso de mestizaje americano. Sin profundidad doctrinal, pero mucho en el empleo de la técnica y lo operacional. El arte del ocultamiento, el camuflaje y la sorpresa, le dieron otra dimensión al campo de batalla y contribuyeron a incrementar la ventaja comparativa entre ambas fuerzas beligerantes.
El paradigma francés

Es Francia y su revolución, la que continuaría desarrollando conceptos en lo doctrinal, en lo técnico y en lo operacional, no es casual que Napoleón Bonaparte, viviera y experimentara luego con esas ideas, que literalmente lo posicionarían a finales del siglo XVIII y principios del siglo XIX, como uno de los más grandes capitanes de la historia. Emulado poco tiempo después, por Simón Bolívar, al materializar sus planteamientos tácticos ofensivos, en el desarrollo de sus campañas militares de la gesta emancipadora, convirtiéndole en el militar más completo que haya parido la América.
Reales ordenanzas españolas

Bolívar, en sus inicios como conductor de tropas, tuvo que practicar el mando y conducción basándose en “Las Ordenanzas Militares Españolas.”
Fue favorecido por la claridad de sus preconcebidas ideas sobre la libertad racional y gracias a la comprensión de las corrientes filosóficas que se encontraban en boga a finales del Siglo XVIII y principios del Siglo XIX, a las cuales tuvo acceso privilegiado durante su proceso de formación, pudo construir el proyecto revolucionario de la integración de los pueblos americanos.
El Estado Mayor General

Es a partir de 1815, que sus conceptos militares y su doctrina sufren una nueva adaptación, e incluye la utilización del Estado Mayor General, un órgano directivo y supervisor, que se encarga del asesoramiento en la toma de decisión del comandante militar en diferentes niveles de las fases de la ejecución, antes de la acción, durante la maniobra y después de terminada la batalla.
Al coordinar las acciones logísticas, de seguridad y de la maniobra los grandes ejércitos en operaciones, sacrifican menos tropas y obtienen mejores resultados.
La influencia británica

El posicionamiento de las ideas de avanzada practicadas por las fuerzas militares y navales de Inglaterra, luego de derrotar a Napoleón en Waterloo en 1815, son las que modifican los planteamientos doctrinales hasta finales del siglo XIX. Bolívar lo entendió y es por ello, que logra contratar un ejército expedicionario británico en 1818, con la finalidad de adiestrar, equipar y disciplinar al Ejército Libertador, en las artes militares, requisito fundamental para enfrentar a las fuerzas pacificadoras comandadas por el Mariscal Pablo Morillo.
Filosofía

   SunTzu, Montesquieu, Adams, Platón, Montecucoli, Napoleón, Aristóteles,Turena, Federico el Grande, Séneca, Carlo Magno, Carlos Gustavo, Cesar, Enrique VIII, Washington, Plutarco, Voltaire, Maquiavelo, Suleiman, Rousseau, Saavedra, Turena, Bentham entre otros…

Referencias consultadas

Reales Ordenanzas Españolas.
Reglamento de Castigos Disciplinarios N#6.
Müller, Ingo: Los Juristas del Horror. Editorial  Actum, Caracas, 2006.
Villaronga. M. “El concepto del líder”, en la Revista Educación, Marzo de 1954, San Juan de Puerto Rico, pág. 3.
Parker G. Historia de la Guerra. Editorial AKAL, pág. 202. Madrid, 2010.
Ferdinand Schneider. Historia de las Doctrinas Militares, pág. 18.
La República, de Platón 450. AC.
Liévano Indalecio. Bolívar, ediciones de la Presidencia de la República, 1988.










domingo, 24 de julio de 2016

Artículo breve: Bolívar y su signo, en conmemoración de los 233 años de su natalicio inmortal

Bolívar y su signo

Escrito por:
Teniente Coronel Edgar Alejandro Lugo Pereira
Especialista en Historia Militar

Simón Bolívar fue un ser humano simple como lo habría sido cualquier súbdito de la corona española. El nació hace 233 años, seis antes del alzamiento de los negros en Haití, como consecuencia directa de la caída de la monarquía absolutista del Rey Luis XVI en Francia por la misma revolución social, política y económica que arraso a Europa a finales del siglo XVIII.

Sin embargo los vientos de cambios soplaban con intensidad ciclónica, intensificándose conforme se iban fracturando las viles estructuras de la separación de clases bajo el signo de una oprobiosa esclavitud.

Ese era el entorno paradigmático que prevalecía en la Capitanía General de Venezuela a partir del 24 de julio de 1783,  fecha registrada en los archivos de la Arquidiócesis de Caracas como nacimiento del futuro hombre de la historia emancipadora de la América Meridional.

Siempre he insistido que los hombres y mujeres de la historia, están signados por circunstancias particulares y colectivas que modelan sus existencias, en el caso de Simón José, no tenía por qué ser diferente. Colocando esta idea en perspectiva, fue hijo varón único, heredero de una vasta fortuna y un abolengo familiar que suma para la fecha de su natalicio solamente en tierras americanas, trescientos años de presencia como pisatarios agricultores provenientes de tierras vascas al norte de la península ibérica.

Simón expresaría en la noche del tres para amanecer del cuatro de julio de 1811 en la Sociedad Patriótica lo siguiente: después de acaloradas discusiones bizantinas que no lograban llegar al acuerdo del compromiso máximo por la independencia, cuando conminó a todos en la reunión y les dijo. “Es que acaso 300 años de calma no bastan, vacilar es perder, La Sociedad Patriótica respeta las decisiones del Congreso, entonces el Congreso debe escuchar los planteamientos de la Sociedad, la cual propone que se declare la Independencia”.

¿Sería que Simón caería en cuenta que su pronunciamiento exaltado, tenía que romper con los abolengos castizos y paralizantes que habían enmohecido a la sociedad americana por tres siglos de inacción y perversas permisividades?

Y manifiesto claramente el uso de la palabra “paralizante”, porque cuando protegemos tradiciones arraigadas en el tiempo, determinamos el camino de la negación absoluta de cualquier signo de cambio, transformación, evolución y desahogo entre otras expresiones para calificar la marginalización excluyente de las grandes mayorías a manifestarse en contra de los poderes que en esa época pre-revolucionaria, eran asfixiantes.

Motivación más que suficiente para que estallará en 1789 la Revolución Francesa. Cualquier parecido con la realidad histórica actual americana, no es casual ni mucho menos un acontecimiento desvinculado, forma parte de un todo, con cada una de sus partes en constante fricción sísmica.


Sin duda la historia bautizo a Simón como el hombre de las dificultades,  hombre nacido bajo el signo de la palabra “Triunfar”.