jueves, 25 de julio de 2013

PARTICIPACIÓN DE LA REPÚBLICA FEDERATIVA DEL BRASIL EN LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL Y SU INFLUENCIA EN LA GEOPOLÍTICA SURAMERICANA


PARTICIPACIÓN DE LA REPÚBLICA FEDERATIVA DEL BRASIL EN LA SEGUNDA GUERRA MUNDIAL Y SU INFLUENCIA EN LA GEOPOLÍTICA SURAMERICANA

Escrito por: Teniente Coronel Edgar Alejandro Lugo Pereira.
Especialista en Historia Militar
IAEDEN, julio, 2013

Introducción

Al iniciarse la Segunda Guerra Mundial en 1939, el gobierno brasileño detentado por el Presidente Getulio Vargas, manisfestó su disposición política de  mantenerse al margen del conflicto, estableciendo para ello una marcada imparcialidad dentro de los acontecimientos que de una u otra manera, iban a impactar el devenir histórico de la nación brasileña en los próximos 5 años. Artículo 1:

 O Governo do Brasil abster-se-á de qualquer ato que, direta ou indiretamente, facilite, auxilie ou hostilize a ação dos beligerantes. Não permitirá também que os nacionais ou estrangeiros residentes no país, pratiquem ato algum que possa ser considerado incompatível com os deveres de neutralidade do Brasil. [1]

Traducción: El Gobierno de Brasil deberá de abstenerse de cualquier acción que directa o indirectamente, facilite, auxilie u hostilize las acciones de los beligerantes. No permitirá también que nacionales y extranjeros, residentes en el país, practiquen algún acto que pueda ser considerado incompatible con la neutralidad de Brasil.

Por lo anteriormente señalado. Es clara y contundente la posición histórica que la República Federativa de Brasil, reflejo en ese entonces al mundo inclusive, fijando una política al margen de la poderosa influencia del Departamento de Estado de los Estados Unidos de Norteamérica, que vio con reserva y cierto recelo, la neutralidad bien marcada, que el presidente Getulio Vargas reflejo en relación con el desarrollo de los acontecimientos mundiales que impactaron los aspectos económicos, políticos y sociales de un mundo que se enrumbaba por los caminos de la guerra para imponer los intereses de lo que conocemos hoy en día como la globalización obedeciendo en su momento, las trasformaciones de las relaciones entre las antiguas monarquías europeas (Alemania, Gran Bretaña e Italia) y las potencias económicas emergentes (EE.UU y Japón) luchando estas ultimas entre sí y a su vez en contra de sus adversarios europeos, para desbancar definitivamente la preeminencia de las potencias coloniales  de la escena económica mundial.

Desarrollo

            El Presidente Getulio Vargas,  a partir del inicio de la conflagración mundial, trata de desmarcarse de la influencia política que venía ejerciendo la nación estadounidense con respecto a los eventos sobre todo económicos que se estaban desarrollando, y que el gobierno del Presidente Franklin Delano Roosevelt  aprovechaba, para estimular la economía de los EE.UU, gravemente golpeada  durante gran parte de la década de los años treinta al sufrir una terrible recesión económica como efecto residual de la “Gran Depresión de 1929” [2]      
Vargas, mantuvo una posición neutral hasta 1941, cuando, y  durante la conferencia de los países suramericanos realizada para ese año en Rio de Janeiro, la comunidad de naciones asistentes a dicho evento decidieron unánimemente, contraviniendo la posición del presidente brasileño, condenar los ataques japoneses a los Estados Unidos y romper las relaciones diplomáticas con Alemania, Italia y Japón.

Esto mostró, al mundo el debilitamiento de la geopolítica regional que a lo largo de más de 100 años, había mantenido el gobierno brasileño en la región. Esto quizás, fue efecto de los profundos cambios revolucionarios que sufría la nación brasileña, por las políticas radicales y fundamentalmente populistas, emprendidas por el presidente Vargas y de cierta manera, habían erosionado la credibilidad y confianza en las relaciones internacionales y sus alianzas, despertando desconfianza, desatando una cadena de eventos internos que llevarían definitivamente a Brasil a romper su neutralidad y entrar de lleno en la conflagración mundial.

Acto seguido, los alemanes atacaron con sus submarinos y buques de superficie a embarcaciones brasileñas, en represalia al fin de la neutralidad brasileña.

Después del ataque con torpedos a las embarcaciones brasileñas, en 1942. Brasil, le declaró la guerra a Alemania y a Italia. Seguido a la firma de un acuerdo entre Brasil y los Estados Unidos, por el cual el gobierno estadounidense se comprometía a financiar la construcción de la primera planta siderúrgica brasileña a cambio del permiso para la instalación de bases militares en la región noreste, más específicamente en la provincia de Natal, porque esa posición geográfica permitía el acortamiento de las distancias tanto aéreas como marítimas entre América y África, utilizando la Isla de Trinidad (Ihla da Trindade) y la isla de Ascensión (Gran Bretaña), como base de apoyo logístico avanzada,  permitiendo controlar las rutas de navegación por medio de patrullajes con destructores, caza submarinos y patrullaje aéreo limitando las incursiones de los submarinos alemanes en la zona central del Atlántico y la entrada de estos últimos al Caribe.

El 28 de enero de 1943, Vargas y Franklin Delano Roosevelt, participaron en la Conferencia de Natal, donde se suscribió, una resolución para fundar en noviembre la Fuerza Expedicionaria Brasileña”[3] (FEB), cuyo primer escuadrón fue enviado en julio de 1944, para combatir en Italia. En ese mismo mes, se declaró la guerra a Japón.

Después del rompimiento de las relaciones diplomáticas con las potencias del eje, comenzaron los ataques y hundimientos de navíos de bandera brasileña por parte de submarinos alemanes causando centenares de bajas civiles, para un total de 36 buques mercantes brasileños destruidos con un saldo aproximado de 1691 náufragos, de los cuales fallecieron aproximadamente 1074 personas.

Esta fuerza expedicionaria, contribuiría de manera importante en los esfuerzos de lucha emprendidos por los EE.UU en Italia, para consolidar la posición de los aliados durante el desembarco de Normandía y evitar el desplazamiento desde la península itálica de contingentes germanos que se encontraban fijados por las fuerzas aliadas en esa región y la fuerza brasileña, jugaría un papel primordial tanto en el empleo táctico, como en el estratégico.

Esta unidad, estaba constituida por más de 25.000 efectivos entre  oficialidad y las tropas. Fue uno de los contingentes más numerosos que país alguno de este hemisferio, aporto al esfuerzo de guerra en contra de las potencias del eje. Esta fuerza combatió apoyando a los aliados en la campaña de Italia, y estaba constituida por una unidad magnitud división que luego sería ampliada, para darle mayor rango de combate.

A partir de septiembre de 1944, la FEB, comienza a conquistar sus primeras objetivos en Italia, pero al mismo tiempo, sufre importantes bajas debido principalmente a su pobre entrenamiento y equipamiento de combate.

 “As tropas seguintes foram encaminhadas a luta praticamente sem treinamento nem adaptacao ao armamento e ao terreno”[4].

Traducción: Las tropas siguientes fueron encaminadas a la lucha prácticamente sin entrenamiento sin adaptación al armamento y al terreno.

La FEB, durante la campaña de Italia entre 1944 y 1945, perdería en combate a 25 oficiales, 8 pilotos y más de 12 mil efectivos de tropas, bajas producidas entre combates directos con el enemigo, el frió y enfermedades relacionadas con el stress de combate, sin embargo, debo recalcar: De todas las divisiones empleadas en el frente italico, fue la de mayor rotación y exposición durante los enfrentamientos, demostrando mayor efectividad para el combate, en comparación con las tropas empeñadas por los estadounidenses. En la conquista de la Abadía de Monte Casino, enclave estratégico de la linea de contención alemana “Carl Gustaff”, quedo evidenciada esta absoluta verdad.               

El 6 de junio de 1945, el ministro de guerra de Brasil, ordeno que la FEB, fuera desmovilizada y repatriada desde Italia, dando cumplimiento al tratado firmado con el Presidente Roosevelt en Natal.

Al finalizar la campaña de Italia, la FEB había hecho prisioneros a mas de 20.000 soldados enemigos, 14.000 solamente en Fornovo di Taro, ademas de capturar 80 cañones y 4000 caballos sin embargo, y a pesar de constituirse este hecho en un logro del gobierno de Vargas y un acontecimiento de heroísmo nacional, no evito la caída del presidente y el fin del estado nuevo brasileño, como proyecto político.

 
“Parece-me que os americanos querem nos arrastar à guerra,  sem que isso seja de utilidade, nem para nós, nem para eles”[5].
Traducción: Me parece que los estadounidenses nos quieren arrastrar a la guerra, sin que eso sea de utilidad para nosotros, pero si para ellos.
 
Al regresar la FEB victoriosa en contra del nacional socialismo alemán y el fascismo italiano, fue transformada por los grupos políticos que adversaban al gobierno de Getulio Vargas en símbolo de resistencia en contra de su régimen y las políticas populistas que él representaba.
Luego de casi veinte años en 1964, esos mismos grupos conservadores aliados a otros en ascenso, utilizarían la memoria de la participación brasileña en la segunda guerra mundial, como pilares de su propia legitimación histórica para combatir el totalitarismo que combatieron en Europa esta vez en contra del gobierno de Joao Goulart.
Conclusiones
Para Brasil, la llegada de la guerra quizás, constituyo un mal necesario, debido principalmente a la necesidad de responder a las nuevas contingencias que en el escenario internacional, había que atender. La dificultad de colocar mercaderías sobre todo el café en los mercados internacionales hacían necesario que el país, se alineara con los EE.UU para salvarse de la inevitable depresión económica que surgiría inmediatamente después de finalizada la guerra.
En términos económicos fue conquistada una meta que era: apuntalar el desarrollo industrial de la nación, produciendo mercaderías para abastecer el esfuerzo de la guerra por parte de los aliados, con lo que el país acelero su marcha hacia la industrialización, superando con creces, el desarrollo de las naciones latinoamericanas y del caribe. Convirtiendo el gigante del sur en una pujante potencia industrial.
Se logró el financiamiento y construcción por parte de los EE.UU, del complejo siderúrgico de Volta Redonda, sin embargo a pesar que Brasil se insertó en el desarrollo económico mundial del capitalismo de la post guerra. Nunca dejo de mantener inmensas fragilidades sobre todo en el aspecto social y económico de su población, manteniendo e incrementando por año los índices de pobreza económica, mortalidad infantil y  marginalidad sin precedentes en América Latina.
Empero, una de las motivaciones fundamentales de participar activamente en la segunda guerra mundial y de ello trata de este ensayo. Era granjearse un puesto en la esfera política mundial para que consideraran a la República Federativa de Brasil, como un actor de importancia hemisférico, destacándose en los ámbitos de la política internacional y por ende, factor de peso e influencia en los ámbitos geopolíticos mundiales
Brasil al negarse a contribuir con tropas de ocupación en Europa, una vez finalizada la conflagración mundial, perdió la oportunidad de participar en  el reordenamiento de la política internacional de la post guerra, pero fue suficiente su alianza con los EE.UU, para que este país ganara la prominencia en América del Sur, como elemento de influencia y consideración en la toma de decisiones dentro de los nuevos organismos reguladores internacionales que nacieron inmediatamente después de  la post guerra.
Para Brasil, La Organización de la Naciones Unidas y la OEA son parte fundamentales de haber adquirido ese grado de influencia en América Latina, sobre todo en el Consejo de Seguridad de la ONU, donde sus aspiraciones a obtener un escaño como miembro permanente le dará indiscutiblemente un puesto destacado en el concierto de las grandes decisiones que modificaran irremediablemente de una u otra forma, la faz de la política mundial en los años venideros.
  
Bibliografía
Textos:
Ferraz, Cesar Francisco. (2005). Os brasileiros e a Segunda Guerra Mundial. Jorge Zahar Editor, Rio de Janeiro.
Castro, Celso. (2002) A invencao do Exercito brasileiro. Jorge Zahar Editor (2002), Rio de Janeiro.
 
Páginas web consultadas




[1] decreto-lei 1.561, do dia 2 de setembro de 1939.
[2] La Gran Depresión fue una grave crisis económica mundial que se prolongó durante la década anterior a la Segunda Guerra Mundial. Su duración depende de los países que se analicen, pero en la mayoría comenzó alrededor de 1929 y se extendió hasta finales de la década de los años treinta. Diccionario de Economía Política de Borísov, Zhamin y Makárova,  www.eumed.net › Diccionarios
[3] www.exercito.gov.br/
[4] Ferraz (2005) el autor expone su apreciación sobre la precariedad del entrenamiento y equipamiento de la FEB en 1944. Pag 62.
 
[5] Pensamiento de Getulio Vargas.

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